La juez Margarita Camus explicó que en el dictamen se cita la posición del cardiólogo que recomienda sacarlo del Penal, mientras que la psicóloga considera que puede continuar en el Servicio Penitenciario. Sin embargo, al momento de darle el beneficio se prioriza el stress ocasionado por su detención.

Camus expresó que «todos los internos tienen la misma situación porque no hay nada más estresante que estar privado de la libertad, a nadie le gusta estar detenido».

También cuestionó que se utilice la ruptura del vínculo con sus hijos. Indicó que la mayoría de los detenidos tienen hijos menores de cinco años y esos chicos también sufren la privación de ver a su padre.

La juez dijo que a raíz de esta decisión imagina que todos los internos a los que se les denegó la prisión domiciliaria ahora solicitarán este beneficio.

Camus opinó que más allá de cuando se resuelve en un caso concreto, dicta un pronunciamiento o una sentencia para un caso determinado, pero se deben medir las consecuencias por la errónea aplicación de la ley.

La juez manifestó que «esta situación, cuando la justicia esta tan cuestionada, hace suponer que hay dos estándares uno para la gente tiene recursos económicos, culturales y sociales y otro para el resto».

 

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