Los operativos fueron llevados adelante en las últimas semanas en el departamento Pocito y en otras partes de la provincia. Según denuncian los vecinos, se realizan alrededor de las 20, la policía llega de forma violenta, todos encapuchados, con las caras tapadas, con las armas en la mano y deteniendo a cualquier persona, especialmente jóvenes que se encuentren en la calle. Después en la comisaría los jóvenes son obligados a desnudarse totalmente para la “requisa”, les pintan los dedos y quedan detenidos varias horas con el argumento de “averiguación de antecedentes”. En declaraciones a Radio Comunitaria La Lechuza emitidas en Informativo FARCO, la vecina Maria Eugenia Prado contó que “con estos nuevos operativos, la policía se lleva a todos los chicos que encuentra por el camino, sin importar la edad, el tamaño, nada, sin preguntar nada y de una forma muy violenta, vienen con sus caras tapadas, vienen encañonando a los chicos y se los llevan a los golpes”.

La mujer relató que en su caso “mis niños tienen 14 años, estaban en la puerta de la casa de un amigo y de repente cayó la policía de forma violenta y sin mediar diálogo, ni motivo alguno, los detuvieron a todos, hasta a un chico que salía de un negocio se lo llevaron. La mamá y la hermana del chico de la casa donde estaban salieron a preguntar porque se los llevaban y no le dieron ningún tipo de explicación, igual los subieron y se los llevaron”.

En el lugar de detención “los desnudaron a todos, supuestamente para implementar la requisa, no sé cómo es la historia, pero quedaron todos solamente con su slip, mostrando sus vergüenzas, había el que tenía su panza gorda, había el que tenía su calzoncillo roto. Hasta el punto más débil ese día se lo tocaron”. Y recalcó que ellos “tienen derechos, como los tenemos todos y principalmente los tienen ellos porque son niños”.

La mujer contó que los familiares estuvieron “horas y horas, padres que iban y venían, no nos daban explicaciones donde los tenían, a los menores los tuvieron detenidos hasta las 4 de la mañana y a los mayores de 18 hasta el otro día a las 13”.

También expresó que “es totalmente injusto que les hayan pintado los dedos por haber estado sentados en la vereda de su casa” porque “hoy en día cuando alguien va a buscar trabajo en la mayoría de las empresas se le pide un certificado de buena conducta. Entonces ¿qué pasa con esos chicos? Ya les están arruinando el futuro”.

La vecina dijo que las familias de los chicos se están “reuniendo para ver qué se puede hacer, necesitamos que nos den una explicación, necesitamos que esto no vuelva a pasar, porque esto es una cosa espantosa, parece la época de la represión”.