El juez de la Corte Suprema Eugenio Zaffaroni y el ex diputado radical Ricardo Gil Lavedra aseguraron ayer que Argentina “no tiene un Código Penal” y cuestionaron “el conjunto de polémicas falsas” y “mentiras demagógicas” generadas acerca del anteproyecto de reforma en el que ambos colaboraron. Lo hicieron al abrir un seminario organizado por la Asociación de Docentes de la UBA (Aduba) en el Colegio Nacional de Buenos Aires, una jornada de la que también participó el abogado Roberto Carlés, coordinador de la Comisión para la Reforma.

Luego de la decisión de trasladar el debate por el anteproyecto de reforma del Código Penal al ámbito de universidades y colegios de abogados, Zaffaroni, Gil Lavedra y Carlés abrieron ayer un seminario de tres días en el Colegio Nacional de Buenos Aires, organizado por Aduba y que continuará los días 12 y 26 de mayo. Hasta allí llegaron tanto alumnos del secundario como estudiantes de Derecho, docentes y otros interesados en este tipo de paneles, que permiten acercarse a la temática y conocer el debate en torno de la reforma, más allá de lo que aparece en los medios de comunicación.

Durante el encuentro, los tres coincidieron en la “situación de caos jurídico” que existe en el país en materia de Derecho Penal, para lo cual resaltaron la importancia de un nuevo código que permita “integrar la legislación penal dispersa”.

En primer lugar, Carlés expuso los principales lineamientos del anteproyecto de reforma. “Hoy no tenemos un Código Penal porque en estos 93 años hubo más de 900 reformas que lo desfiguraron”, enfatizó el abogado. Esa idea de un paradójico “código caótico” fue acompañada luego por Gil Lavedra y por Zaffaroni, cuando fue el turno de la participación de ambos.

Finalmente, Carlés aseguró que el anteproyecto rescata “lo mejor de la tradición” del Código Penal actual, que data de 1921 y fue consensuado entre las distintas fuerzas políticas, de la misma manera que en la propuesta de reforma actual participó no sólo el oficialismo, sino también la UCR y el PRO. “Queda ver si la clase política tiene la misma madurez que tuvo en 1921 para acordar”, reflexionó el letrado.

Por otro lado, Zaffaroni y Gil Lavedra desmintieron que el anteproyecto elimine la prisión perpetua, pena que técnicamente “nunca existió”. “Hay una pena que llamaron perpetua pero no se aplica porque a los 20 años, con dos tercios de la pena, se podía pedir la libertad condicional”, puntualizó Zaffaroni. Además, ambos explicaron que la reincidencia, otro de los puntos controvertidos, “no se hizo desaparecer”, sino que “se evalúa de manera distinta”. “El Código Penal está para juzgar actos y no se puede reprochar a alguien por lo que es, sino sólo porque lo que hizo o no hizo”, sentenció el magistrado.

Por su parte, Gil Lavedra insistió con la necesidad de sistematizar nuevamente la legislación penal y remarcó que las reformas motivadas por el asesinato de Axel Blumberg “descuartizaron” el Código Penal actual. El radical apuntó también contra los “sectores que tratan de deslegitimar” el debate por la reforma y que instalan “polémicas públicas” que “en su gran mayoría son falsas”.

Sin mencionar a Sergio Massa, principal portavoz del rechazo contra la reforma, Gil Lavedra pidió “razones y argumentos que queden fuera de toda conducta oportunista”. Además, destacó el seminario organizado por Aduba. “Esta actividad tiene que ver con el debate público”, afirmó el ex diputado, en referencia a la necesidad de una discusión seria en la sociedad respecto de la modificación en el código.

A su turno, Zaffaroni también cuestionó las “mentiras demagógicas” en torno de las reformas y reclamó las modificaciones necesarias, debido a que “hoy las penas se cuantifican arbitrariamente”. Sin embargo, el juez de la Corte Suprema advirtió que no será una tarea fácil, sino que deberá recorrerse “un camino largo” hasta lograrlo. Por último, el magistrado criticó el accionar de los medios de comunicación que “crean la realidad violenta que no tenemos”, a la vez que aseguró que “la inseguridad es un problema mundial”.

La iniciativa de llevar el debate a un espacio académico fue celebrada por los asistentes, que en muchos casos no provenían del ámbito del derecho y se acercaron al seminario para conocer de primera mano el anteproyecto. “Quise ver de qué se estaba hablando porque desconocía del tema. Vengo de otra disciplina y me resulta muy interesante lo que se habla de la reforma. Fue una introducción muy precisa”, le contó a Página/12 la socióloga Marcela Ferramondo. “Es muy bueno que ya desde chicos nos interesemos por esto”, consideró por su parte José Ignacio Mira, estudiante del Escuela Carlos Pellegrini.

Además de esta apertura del debate, el texto completo de la iniciativa ayer fue subido a Internet para ser consultado por cualquiera que esté interesado en indagar más sobre la propuesta de reforma.

 

http://www.pagina12.com.ar/diario/elpais/1-244904-2014-04-25.html