En una nueva vuelta de tuerca que compromete aún más la situación del comisario imputado Pablo Márquez, esta semana una mujer policía dio su testimonio y dijo que, desde que se hicieron públicas las denuncias contra el acusado, la División del Comando de Acción Preventiva (CAP) VIII que estaba a cargo de éste tuvo un descenso abrupto: pasó de registrar 400 detenciones mensuales a 150.

Así, una sola repartición habría efectuado unas 250 detenciones arbitrarias mensuales. La oficial, con rango de cabo, se desempeñaba en el área administrativa de la División y, por lo tanto, habría estado al tanto de las estadísticas policiales.

Pero hay más. Al testimonio de la mujer, se sumó esta semana otra declaración reveladora: la de un “jefe de Compañía” –subordinado de Márquez–, a cargo 30 agentes que patrullaban las calles, que corroboró las denuncias que le costaron a Márquez la imputación.

El caso estalló en noviembre del año pasado, cuando este diario publicó una denuncia de una policía contra Márquez. La denunciante aseguraba que ella y el resto de sus compañeros que patrullaban las calles eran obligados a realizar detenciones, existieran o no contravenciones o delitos, con el objetivo de subir las estadísticas policiales y, supuestamente, la eficiencia de 
la División. Luego, se conocieron dos denuncias anteriores similares contra el mismo comisario.

Según lo denunciado, los policías que no cumplían con un mínimo de detenciones eran obligados a realizar “recargas horarias”, es decir, trabajar entre seis y ocho horas extras sin remuneración.

Esos hechos descriptos fueron ratificados por los dos nuevos testimonios. Tanto la cabo como el jefe declararon que esas recargas no eran registradas en los libros de guardia por el miedo que tenían los policías a mayores represalias y agregaron que una gran cantidad de aprehensiones se consideraba indicativo de supuesta eficiencia de la tarea de Márquez, lo que confirma lo dicho por los tres denunciantes.

El jefe de Compañía agregó un dato nuevo: quienes sí cumplían las órdenes de apresar a personas, hubiera o no contravención, eran premiados con un día de franco. Y confirmó que los que realizaban más detenciones eran premiados con la exhibición de su foto en la División y un diploma.

“Traidores”. Además, el jefe dijo que casi todos los 30 integrantes de su compañía fueron trasladados luego de que trascendieran las denuncias contra Márquez. Y manifestó que su grupo de trabajo era denominado en el Distrito VIII “La compañía de los traidores” por haber estado compuesta por quienes se oponían a realizar detenciones arbitrarias.

Valer recordar que, en febrero pasado se publicó la noticia del traslado de unos 11 policías de su lugar de trabajo, todos denunciantes y testigos, lo que es interpretado por ellos como represalias por su involucramiento en la causa.

Y, al igual que otros testigos y los denunciantes, el testimonio de la mujer policía compromete no sólo a Márquez, sino también a sus superiores. La testigo asegura que tanto el director de Tácticas Operativas como el jefe del Distrito, del cual depende la División CAP VIII, estaban al tanto del proceder de Márquez y de sus estadísticas.

Ambos testimonios, a los que accedió este diario, fueron tomados por el fiscal de la causa, Pablo Molina.

Los delitos. Márquez fue imputado por los delitos de coacción y abuso de autoridad reiterado, en una decisión sin precedentes para la fuerza policial de Córdoba.

Sin embargo, por los hechos denunciados y luego ratificados por testigos, el fiscal de la causa podría imputarle delitos más graves, como amenazas y privación ilegítima de la libertad.

Además, Sergio Comugnaro, el jefe de Policía de Córdoba, aseguró el mes pasado que “la Policía bajo ningún punto de vista obliga a nadie a hacer detenciones; lo que se obliga es a que trabajen, a que cumplan con su función y prevengan el delito, que no sólo se gaste combustible en el patrullaje. Dentro del marco de la ley, todo; fuera del margen de la ley, nada”.

Reclamo

Críticas. El Código de Faltas habilita a los policías a realizar detenciones por diferentes contravenciones. Es criticado por sectores que aseguran que permite detener a personas de manera arbitraria, gracias a figuras tildadas de inconstitucionales como el “merodeo” u otras que se usarían de manera abusiva, como “resistencia a la autoridad”.

Comisión. En la Legislatura de Córdoba se creó este año una comisión para evaluar posibles cambios al Código.
Defensa. El Gobierno asegura que el Código es una herramienta para prevenir el delitos y luchar contra la inseguridad.

Fuente: http://www.lavoz.com.ar/ciudadanos/tras-denuncias-bajaron-400-150-detenidos-al-mes?utm_medium=email&utm_campaign=Titulares+2012.03.10&utm_content=Titulares+del+d%C3%ADa+10-03-2012+MsgID_16R543163&utm_source=Titulares