Ante los incidentes ocurridos en la Unidad Penal Nº 2, fueron varios los familiares que se acercaron a la cárcel con el fin de interiorizarse de lo que estaba aconteciendo.

Claudia, madre de un interno alojado en el penal por problemas con las drogas hace cinco años, denunció que en el penal se comercializa marihuana.
Señaló que su hijo se quiere rehabilitar de su problema con las adicciones, pero que en el Servicio Penitenciario le manifiestan que no hay lugar para que se lo trate. El joven habría intentado quitarse la vida en dos ocasiones. Además, recordó que se venden drogas en la Unidad y quien lo hace sería un propio interno. “No sé si no ven o hacen la vista gorda”, dijo. Indicó que en los controles previos al ingreso al penal,  a los familiares se los revisa de pies a cabeza, por lo que no entiende cómo entra la droga.