HUERGO (AR).- Por una golpiza que sufrió por parte de policías de Huergo hace más de un año perdió dos dientes, le quebraron dos costillas y estuvo internado 5 días en terapia intensiva. Ahora Adrián Sandoval denunció públicamente que miembros de la comisaría local hostigan a su hijo de 20 años y solicitó una audiencia con el jefe de la policía provincial, Octavio Uribe.

«Este fin de semana mi hijo estaba en la calle tranquilamente con su novia y un oficial lo comenzó a insultar y amenazó con sacar su arma. Cuando va al boliche, la policía al único que revisa es a él, lo molestan en todo momento», relató Sandoval. «Ahora tenemos miedo. Cada vez que mi hijo sale yo le mando mensajes para ver como está, lo llamo, porque no se si le puede pasar algo. Él estudia en Cipolletti y se ha tenido que ir a pasar algunos días a Cinco Saltos y a Chichinales a la casa de unos familiares para evitar que los problemas sigan», continuó.

Según indicó Sandoval, el año pasado policías de Huergo lo esposaron y lo golpearon tras un incidente. Estuvo internado 5 días en terapia intensiva y desde entonces comenzó a realizar las denuncias tanto en la vía judicial como públicamente, pero hasta el momento no se ha juzgado a los responsables.

El 31 de enero de este año, Sandoval y su mujer viajaron hasta Viedma con la intención de reunirse con el jefe de la Policía, Octavio Uribe, para interiorizarlo sobre la situación, pero en aquella ocasión les comunicaron que Uribe los atendería en la Regional II de Roca. El 16 de este mes recibieron un llamado desde Viedma para avisarles que ese mismo día a las 19, Uribe los atendería, pero al acercarse a la sede regional y esperar más de 90 minutos, decidieron retirarse, sin concretar la entrevista.

Fuente: http://www.rionegro.com.ar/diario/rn/nota.aspx?idart=821219&idcat=9525&tipo=2