Con los ojos rojos, luego de haber pasado una de las noches más largas de su vida, Gonzalo Bugatto dialogó con Tiempo Argentino sobre el crimen de su hermano Lautaro, de 20 años, a manos de un policía de la Buenos Aires II. “Era un amigo impresionante, un hermano increíble. Estaba enamorado de su hija de dos años. Se había hecho cargo de todos, estaba abocado a su familia y también al deporte y a sus compañeros. Era un verdadero luchador”, resumió el joven mordiendo dolor.

“Voy a ir a fondo contra el responsable para que toda la justicia le caiga encima, por mi hermano y por todos aquellos que perdieron la vida en circunstancias similares, víctimas de gatillo fácil”, dijo Gonzalo en la puerta de la casa mientras sostiene orgulloso la camiseta que su hermano había usado en la Reserva de Banfield.
Lautaro fue asesinado el domingo pasado en Burzaco, partido de Almirante Brown, cuando, alrededor de la una de la madrugada, recibió un balazo por la espalda que le perforó un pulmón. Por el crimen fue detenido el policía David Benítez, que se movilizaba junto a su mujer en un Renault 12, a pocos metros del ciclomotor en el que iban su hija y su hermana.
Según la versión del imputado, dos delincuentes intentaron robar la moto y él trató de impedirlo. De acuerdo con esa hipótesis, los sospechosos dispararon y el policía respondió también a los tiros (ver aparte). Pero el fiscal Juan José Vaello piensa diferente. En la escena del crimen, los investigadores secuestraron siete casquillos 9 mm, que corresponderían a una solo arma: la reglamentaria de Benítez. Finalmente, los dos delincuentes se dieron a la fuga y no se pudo determinar que también hayan disparado.
Gonzalo tiene 28 años y es el mayor de los hermanos Bugatto. Es militante del Movimiento Evita de Lomas de Zamora donde, desde hace pocos meses, coordina el área de Juventud de ese municipio. “Hace unos meses estábamos marchando en José León Suárez por los asesinatos de dos chicos en manos de esta policía. Jamás me imaginé que esto me podría pasar a mí y menos a mi propio hermano”, explicó.

–El gobernador Daniel Scioli pidió que al imputado le caiga todo el peso de la ley…
–Creo que es una explicación simplista, porque el asesinato es una práctica policial habitual. Esta es la misma fuerza que mató a Maxi Kosteki y a Darío Santillán en el Puente Pueyrredón, en 2002; y desapareció a Luciano Arruga y a Jorge Julio López.

Ayer por la tarde, amigos y familiares del joven, junto a un grupo reducido de vecinos, estaban recluidos en la casa de Alicia, su madre, en Avenida Monteverde al 6600 donde Lautaro era el único sostén del hogar, desde que su padre falleció, un año atrás. La víctima fue ejecutada a pocos metros de la puerta de la vivienda mientras intentaba subir a su Peugeot 206 gris con un primo y dos amigos con los que iba a ir a bailar.
Desde el entorno del futbolista indicaron que cuando el policía vio que Lautaro había sido herido intentó huir pero los vecinos se lo impidieron.
“Pienso igual que el resto de mi familia. Este no fue un hecho de inseguridad sino de gatillo fácil y abuso de la autoridad policial. La fuerza perdió todo control. No puede ser que un efectivo haga esta salvajada.”

–¿Cómo es el día después? ¿Cómo se sale adelante?
–Nos contenemos entre todos. Tratamos de sacar fuerzas a través del dolor y la búsqueda de justicia. Eso es lo que nos va a motivar hasta el final. Agradezco de corazón el apoyo de la militancia, que nos dieron desde las diferentes agrupaciones.<

 

Fuente: http://tiempo.infonews.com/2012/05/08/policiales-75032-esta-es-la-misma-fuerza-que-mato-a-maxi-kosteki-y-dario-santillan.php