La séptima edición de la Marcha de la Gorra se vivió ayer con más colores, más alegría y, en especial, con una multitud récord de asistencia. Y se convirtió en la segunda movilización masiva en cinco días contra el Código de Faltas provincial. Al finalizar, en la plaza San Martín hubo incidentes.

La primera fue la Quinta Marcha del Orgullo y la Diversidad, que se desarrolló el sábado pasado. Esta llevó como consigna la derogación de la norma, además de la mayor inclusión en salud y trabajo de las personas trans y el fin del financiamiento estatal de la Iglesia.

Una decena de murgas y actores disfrazados de policías con nariz de payasos desplegaron su arte al inicio de la marcha de ayer. Metros más atrás, una enorme bandera del Colectivo de Jóvenes por nuestros Derechos (principal organizador) del ancho de la calle iba al frente de miles de participantes. Atrás estaban las organizaciones sociales y, al último, las agrupaciones políticas.

Para dimensionar la movilización, el dato es que los asistentes ocuparon –con banderas, batucada y cientos de consignas contra el Código de Faltas– todo el largo y ancho de casi tres cuadras de la avenida Colón.

“No es merodeo, es paseo”, se escuchaba en el altoparlante; “mi vestimenta no debe ser juzgada”, se leía en una remera; “la juventud de este pueblo quiere libertad”, decían algunas banderas. “Hoy resistimos como desde hace siete años, pero con mucha alegría. Este código lo único que hace es ir en contra de la libertad de los jóvenes”, aseguró “Cafu”, miembro del Colectivo.

Por primera vez participó la organización Techo (conocida como Un Techo para mi País). “Vinimos porque la aplicación del Código no hace más que excluir y acentuar las diferencias sociales de un montón de jóvenes y familias con los que trabajamos. Lo vemos todos los días”, dijo Gonzalo Olivares, titular de la entidad local.

El Código de Faltas es una ley provincial que permite a la Policía detener a un ciudadano mientras comete alguna contravención. El objetivo es prevenir delitos y castigar conductas que perjudican la vida cotidiana y así facilitar la convivencia. Sin embargo, se critica que su aplicación es arbitraria y que se usa para cercenar la libertad de circulación de jóvenes –y adultos– de barrios menos acomodados. Además, se le reprocha contener normas inconstitucionales, como la figura del merodeo.

La marcha partió de Colón y La Cañada y se desplazó hasta la plaza San Martín. Algunos manifestantes atacaron con botellas de vidrio a mujeres policías y apedrearon locales comerciales y realizaron pintadas en la iglesia Catedral.

En detalle

La Luciérnaga. Este mes, la revista de los chicos de la calle celebra la Convención de los Derechos del Niño y pone la lupa en los reclamos de la 7ª Marcha de la Gorra en Córdoba.

Cifras. El legislador Roberto Birri (Frente Cívico) presentó un pedido para que el Gobierno informe sobre las estadísticas de detenciones por violación al Código de Faltas.

Reclamo. Concejales del bloque Eva Duarte, que preside Olga Riutort, presentaron un documento al gobernador José Manuel de la Sota para solicitar su urgente actuación sobre el Código de Faltas. Se criticó que el procedimiento esté a cargo de la Policía, con sus consecuentes abusos.

 

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