Si no se esclareció de manera inmediata quiénes fueron los secuestradores de Julio López fue porque de movida intervino la Policía Bonaerense. En la provincia de Buenos Aires no hay cuerpos especializados en criminalidad organizada porque es la propia policía quien protege los circuitos del crimen organizado.

Para completar la institucionalidad sancionada en 1996 del Código Procesal Penal que está vigente en la provincia de Buenos Aires, dos años después de aquel entonces y antes de la implementación del nuevo código, en el 98 se aprueba la Ley del Ministerio Público. Ya en esa ley estaba creada, desde el punto de vista formal, la Policía Judicial.

Esta iniciativa viene a llenar este vacío. Durante todos estos años las investigaciones criminales, particularmente aquellas que tengan que ver con los delitos más serios y complejos, estuvieron en manos de la propia policía de la provincia de Buenos Aires que había articulado un dispositivo interno -a mi modo de ver muy débil- en materia de asistencia técnica a este tipo de investigaciones. Lo clave en esto es completar aquella institucionalidad. Según mi opinión quedaba renga la capacidad investigativa del Ministerio Público en las nuevas normas procesales vigentes hace 12, 13 años y la creación dela Policía Judicialviene a completar eso.

Creo que la razón fundamental está en que la investigación de los delitos complejos no debe estar en manos del poder administrativo, del Poder Ejecutivo de la Policía de la provincia de Buenos Aires. Si el poder político, durante todos estos años, quiso mantener esa institucionalidad era porque tenía interés particular en inmiscuirse en este tipo de investigaciones, a ver qué ocurría en las mismas. Por otro lado, hubo resistencias del propio Ministerio Público que no quería apropiarse de este conjunto de tareas, porque también en la Justicia hay un espíritu conservador muy importante y cómodo, donde es mucho más fácil no hacerse cargo de las tareas investigativas en todas sus dimensiones.

El proyecto de la CPM es elogiable. El trabajo y esfuerzo de la CPM en esta materia es absolutamente encomiable. A ellos les debemos este consenso técnico, institucional y legislativo. El proyecto es fundamental para investigar el delito complejo: es que cuando hay incidencias, hay participación, intervención de la institución policial en la comisión de estos delitos (y esto en la provincia de Buenos Aires es algo regular y corriente) no puede ser la propia policía quien investigue. Hay una respuesta corporativa que hace que le garantice impunidad cuando la policía investiga a otros policías. La causa más patética al respecto es la desaparición de Julio López. Si no se esclareció de manera inmediata quiénes fueron los secuestradores de Julio López fue sin lugar a dudas porque de movida intervinola Policía Bonaerenseque, durante un año y medio de investigación, le quiso hacer creer a todo el mundo de que se trataba de un extravío y que había que averiguar dónde se encontraba esa persona. Este es un ejemplo claro de lo que señalo: evidentemente tiene que haber un poder policial investigativo que esté en manos de las autoridades que llevan adelante la investigación criminal, que es el Ministerio Público.

La otra cuestión fundamental es que se abre la posibilidad de quela Policía Judicialse especialice en criminalidad organizada. En la provincia de Buenos Aires no hay cuerpos especializados en criminalidad organizada porque es la propia policía quien protege los circuitos del crimen organizado. Nunca han invertido en crear sistemas sofisticados de control del narcotráfico, de la trata de personas, de desarmaderos y de todo tipo de delito complejo. Esto abre la oportunidad de especializar un cuerpo de fiscales por un lado y un cuerpo de policías por otro en lo que es la investigación de organizaciones criminales complejas. Yo creo que ésta es la consistencia técnica de la propuesta.

Fuente: http://democratizaciondelajusticia.wordpress.com/2012/03/01/el-proyecto-es-fundamental-para-investigar-el-delito-complejo/