“El macrismo no tiene interés de construir ni de validar mecanismos que limiten el poder el Estado, y por lo tanto no hay ningún control contra la Violencia Institucional”, sostuvo la diputada Claudia Neira. Por eso, dijo, “impulsamos la creación de este observatorio para visibilizar estos abusos y fomentar políticas de acción positiva que supriman este tipo de prácticas”.
La diputada Claudia Neira, del bloque Buenos Aires 20/21 participará de una conferencia de prensa este lunes en la Sala de Conferencias en la Legislatura de Ciudad Autónoma de Buenos Aires. En dicha conferencia se presentará el proyecto de Creación de un Observatorio de Seguimiento de Casos de Violencia Institucional propuesto por Claudia Cesaroni, abogada del CEPOC; María Elia Capella, del observatorio de Derechos Humanos; y Pablo Ferreyra, familiar y querellante en la Causa Mariano Ferreyra.

Pablo Ferreyra, autor del proyecto junto con María Elia Capella y Claudia Cesaroni, se refirió al mismo como “un aporte hecho por particulares y organismos de Derechos Humanos que busca impulsar un observatorio que recoja de todo tipo de Violencia Institucional. En hospitales públicos, frente a la problemática del Aborto No punible; de abusos policiales, como en el caso del accionar de la Policía Metropolitana en el hospital Borda”, y agregó que el observatorio busca “erradicar la Violencia Institucional y que esas denuncias sirvan para controlar a la policía y a otras dependencias del Estado”.

En los fundamentos del proyecto se detalla que el Observatorio se propone constituir “medidas de acción positivas para prevenir, perseguir y erradicar todas aquellas prácticas vinculadas con el abuso de poder y el maltrato institucional”.

La diputada Claudia Neira, que preside la Comisión Especial de Políticas Públicas para Ciudadanía Plena, ha dado impulso legislativo a esta iniciativa y destacó que “debe ser el propio Estado, a través de sus instituciones, quien debe asumir la responsabilidad de propiciar herramientas que permitan visibilizar y evitar estos hechos de violencia”.

Este debate cobra especial relevancia en la actualidad frente a lo sucedido en el hospital Borda. Neira refirió que “el accionar desmedido de la Policía Metropolitana solo se puede entender en el marco de la ausencia de una norma que controle la actuación de las fuerzas de seguridad en manifestaciones” y agregó que “Montenegro miente cuando afirma que la policía actuó de acuerdo al protocolo. La Ciudad no estableció ningún criterio para el desempeño de la Fuerzas de seguridad en manifestaciones y se negó a adherir el protocolo que rige a nivel nacional”.