El colectivo “lagallealacalle”, un conglomerado de organizaciones defensoras de los Derechos Humanos, profesionales del derecho y amigos de Karina Dana “La Gallega” Germano López, reclamarán hoy desde las 10:30 ante el Palacio de Tribunales que la Corte Suprema le permita salidas transitorias de la cárcel de Ezeiza, donde está recluida cumpliendo una condena a 30 años de prisión.
“La Gallega” fue detenida en Brasil el 1 de febrero de 2002, acusada de haber participado del secuestro de Washington Olivetto, un empresario y conductor televisivo. Un tribunal la condenó a 16 años de prisión; apeló y le fue peor: la revisión desembocó en una pena de tres décadas en el penal de Carandirú. El fallo omitió siquiera mínimamente considerar la historia de vida que arrastra. Es hija de desaparecidos, militante por los Derechos Humanos y una de las fundadoras de la filial Zona Norte de H.I.J.O.S.
Desde la cárcel, la “Galle” contó su historia: “Mi infancia transcurrió en los años ’70, tan especiales por estos lugares. Mis padres, militantes populares, comenzaron a ser perseguidos en el ’74, donde después de detenciones y allanamientos, hasta interrogatorios sufridos por mi hermano menor (de ocho años) y yo misma con diez años, en manos de los paramilitares de los principios de la Triple A, pasamos a la clandestinidad. Esta duró dos años hasta que mi padre fue secuestrado y llevado al Centro Clandestino de Detención ESMA, donde luego de torturas impensables fue uno de los 30 mil desaparecidos de este país.  Entonces mi madre, con su coraje de mujer, nos salva la vida exiliándonos junto a mi hermano en Suecia, en el año 1976. Luego nos mudamos a la península ibérica, donde crecí junto a vascos y catalanes. En 1998 regresé a Buenos Aires, a denunciar y reconstruir la militancia y secuestro de mi padre.” Toda la historia está narrada en el sitio web <http://lagallealacalle.blogspot.com/>.
El 9 de noviembre de 2006, tras solicitar ante el cónsul argentino en San Pablo la aplicación de la Ley 25.306 que fijó el Tratado sobre Traslado de Condenados, pasó a cumplir la condena en una cárcel argentina. Pero los otros condenados que quedaron en Brasil presentaron un habeas corpus y obtuvieron “un régimen de salidas temporarias, al haber cumplido un sexto de la condena”. Entonces, a través de su abogado, Eduardo Soares, alegó “una situación de inferioridad, ya que la ley penitenciaria argentina no contempla esa posibilidad hasta no haber cumplido la mitad de la condena”.
La Corte Suprema le denegó en 2009 las salidas transitorias. Sus compañeros de causa están gozando de un régimen de salidas amplio y están alojados en cárceles con sistema semiabierto. Por regresar a su patria a cumplir una pena que sus allegados insisten en considerar injusta y sin pruebas, sus condiciones de detención son extremadamente más duras.
El 31 de octubre del año pasado, el procurador general adjunto, Luis González Warcalde, dictaminó que Germano López debe comenzar a salir de prisión.“La solución que propicio no sólo está basada en el principio general de interpretación pro hómine de los instrumentos internacionales sino que se adecua, por su sentido de equidad, al de la reinserción social de las personas condenadas”, explicó.
Además, González Warcalde señaló: “Esto permite considerar que se podría hacer una excepción a la letra de la ley que exige, para la concesión de las salidas transitorias o la incorporación al régimen de la semilibertad, un tiempo mínimo de ejecución de la mitad de la condena. Y recordó que, según las normativas vigentes, el régimen penitenciario procura limitar la permanencia del condenado en establecimientos cerrados y promoviendo en lo posible y conforme su evolución favorable su incorporación a instituciones semiabiertas o abiertas o a secciones separadas regidas por el principio de autodisciplina.”
Hoy, frente a Tribunales, los manifestantes le pedirán a la Corte Suprema que acepte el pedido de la Procuración y le devuelva parte de la libertad a “La Gallega”.